La nueva ISO 14001:2015 ya está aquí. ¿Existen grandes cambios?
Tras dos años en proceso de revisión, varios borradores y más de 5000 comentarios, así como de propuestas de modificación por parte de la comunidad internacional y la aprobación formal por parte de los organismos de normalización nacionales, finalmente la revisión de la ISO 14001 entró en vigor el 15 de septiembre de 2015, justo once años después de la publicación de primera versión de la norma. En el mismo mes de septiembre se publicó también su traducción oficial en español. Ahora existe un periodo de transición de tres años en el que conviven las dos versiones de la norma y que dura hasta el 14 de septiembre de 2018.
¿Qué impacto tiene la nueva norma ISO 14001:2015 en su empresa?
Una modificación de forma es la “estructura de alto nivel” en la que se construye la nueva norma y que, según la ISO, se aplicará a todas las nuevas normas de sistemas de gestión. De esta manera, las empresas aprovechan la uniformidad en la clasificación, texto y terminología.
En cuanto al contenido, la norma exige, entre otras cosas, una mejora continua del rendimiento ambiental y que el Sistema de Gestión Ambiental (SGA) cubra también todos los procesos externalizados. Asimismo, deben englobarse las dependencias e interacciones internas y externas de la empresa, incluidos sus riesgos y oportunidades.
Además, la empresa debe tomar en mayor consideración el ciclo de vida del producto y sus posibles efectos en el medio ambiente. Esto incluye todo lo que concierne a la extracción de materias primas, desarrollo, producción, transporte, manipulación y gestión de residuos. Las empresas también deben tener en cuenta los intereses y expectativas de las partes interesadas, tales como los inversores, empleados, clientes o autoridades. La documentación del sistema de gestión ambiental se ha vuelto más flexible. Ya no es aplicable el manual del sistema de gestión ambiental, en su lugar se incluye ahora como requisito disponer para determinados aspectos de información documentada.
Aunque la nueva versión incluye grandes novedades, desde TÜV SÜD no consideramos necesaria la reelaboración completa del sistema de gestión medioambiental. Sin embargo, sí que es hay empezar a adaptarse a los cambios.
La transición a la norma ISO 14001: 2015 puede llevarse a cabo en el curso de una auditoría de renovación o de auditorías de mantenimiento.